"Los más importante es tener confianza en uno mismo"

Entrevista a Consuelo Alfaro, psicóloga

Mari Luz Cuenca y Eduardo González

La Psiquiatría y Psicología son ciencias que estudian la mente y sus trastornos. Todos padecemos en determinados momentos problemas emocionales o mentales pero por desgracia muchas personas no les prestan la suficiente atención. Estos trastornos pueden ir a más si no se tratan y así afectarnos a nuestra vida diaria. Psiquiatras y psicólogos son los llamados “médicos de la mente” y nos pueden orientar en situaciones dificultosas.

Por estas razones hemos entrevistado a la psicóloga Consuelo Alfaro, residente en Utrera.

Sinestereotipos: Hola, Consuelo, gracias por concedernos la entrevista

Consuelo: De nada, me pareció una idea muy interesante.

S: ¿Cuando decidiste ser psicóloga?

C: Lo decidí después de terminar el Bachillerato. Sabía que quería dedicarme a trabajar con un colectivo de personas con dificultades aunque no sabía muy bien si ser ATS, trabajadora social o psicóloga. Me decidí por mi nota de selectividad y porque psicología tenía muchas salidas.

 S: ¿A qué se dedica un psicólogo?

C: Básicamente a trabajar con personas que tienen dificultades, no físicas, sino mentales, cuestiones que afectan más a un ámbito personal.

S: ¿Cuál cree usted que es la diferencia entre un psiquiatra y un psicólogo?

C: Básicamente se diferencia en que el psiquiatra es médico y tiene capacidad para diagnosticar fármacos, es decir, es más clínico y un psicólogo trata más los aspectos más sociológicos y emocionales.

S: ¿Qué tipo de pacientes tienes?

C: Durante los 20 años que llevo trabajando en los servicios sociales he pasado por distintos programas. Empecé trabajando por 3ª edad, en un programa de ayudas a domicilio, después estuve durante 10 años en un programa de drogodependencia y menores, pero actualmente son niños y adolescentes.

S: Sobre la fuerza de la Psicología, ¿puede cada persona ser lo que se propone y afrontar todos sus problemas?

C: Yo cuando empecé a estudiar pensaba que todo se podía modificar, pero a lo largo del tiempo que llevo trabajando me he dado cuenta de que hay una parte de la persona que se puede modificar, y una parte que es genética. Una persona puede estar predispuesta genéticamente a ser más sensible a depresiones si se da un cierto entorno.

S: ¿Cómo ayudas a los pacientes según el tipo de problema que tienen?

C: Pues yo trabajo dependiendo de la problemática. Actualmente existen muy buenos diagnósticos.

S: ¿Es difícil trabajar con personas que tienen problemas mentales?

C: Depende, si por ejemplo cuando tratamos con trastornos mentales graves las dificultades son mucho más importantes e incluso hay casos en los que hay que trabajar con el paciente medicado, porque si no sería muy difícil de trabajar con ellos.

S: ¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

C: Lo que más me gusta de mi trabajo es que en algunos hay buenos resultados

S: ¿Qué es lo que tiene que estudiar un psicólogo?

C: Pues se estudia un poco de todo ya que en la carrera también se estudia informática, estadística, evolutiva, biología, un poco todas las ramas del comportamiento.

S: ¿Hacéis algún tipo de test para saber qué tipo de enfermedad tiene el paciente?

C: Para un diagnóstico de una enfermedad mental se necesitan pruebas... Incluso para saber la capacidad mental.

 

S: ¿Cómo podríamos nosotros ayudar a un compañero que tenga algún tipo de problema?

C: Pues lo primero es ponerse en contacto con gente especializada que sabrá mucho más que cualquiera, no avergonzarse por ir a un psicólogo o psiquiatra. Aún es clave que no de vergüenza ir a psicólogo, las personas aún en año 2011 se avergüenzan por tratar sus enfermedades mentales cuando son enfermedades como otras…

S: ¿Cómo curar una depresión?

C: El tiempo es un factor decisivo pero no lo cura todo. No es lo mismo que se te muera un abuelo de 90 años a que un hijo muera… Todo influye, por eso cada depresión se cura de manera distinta.

S: Nosotros como estudiantes, ¿qué podemos hacer para no ponernos nerviosos ante un examen?

C: Lo más importante es tener confianza en uno mismo, aunque empecemos desde cero, se trata que las cosas que hagamos las hagamos de verdad “a lo mejor me equivoco pero es lo que yo he creído”, si nos acostumbramos a copiar perdemos esa confianza y así poco a poco ganamos inseguridad.